Actualmente en México somos 105.9 millones de personas. Hablando de la población infantil podríamos decir que 12 de cada 100 niños (datos del INEGI) no sabe leer ni escribir. Esta es una cifra grave, pues la educación es la base de todo y de ésta depende que nuestro país avance.
Cada que las elecciones se acercan escuchamos decir a los candidatos que la educación será el principal objetivo y meta a cumplir; sin embargo este es sólo un gancho para asegurar el voto de muchos que, ingenuamente, creen que la educación en México recibirá más y mejor apoyo.
Hoy los dueños del poder, aquellos que juraron centrase en la educación dicen velar por la misma, pero ¿de qué manera lo hacen? Pues viajan al extranjero para conseguir la visita de algunas exposiciones a los diversos museos de la capital, o bien, viajan para que la cultura mexicana llegue a las salas de los museos internacionales.
El encargado de dichos viajes es el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA), Sergio Vela, quien en 2007 estuvo 46 días ausente, pues se encontraba en el extranjero velando por la cultura y, por ende, la educación de los mexicanos.
El pasado 24 de febrero los medios de comunicación anunciaron que Vela había gastado 761 mil 584 pesos durante sus nueve viajes realizados el año pasado, realizando un gasto aproximado de 12 mil pesos diarios. Si ese dinero fuera utilizado para la educación en el país, entonces diario podrían comprarse 1000 cuadernos profesionales o 3000 bolígrafos u 80 libros o hasta 2 computadoras de las más austeras para que alumnos de las escuelas públicas tengan acceso a la educación.
Ahora bien, hablando en términos culturales, esos $12 000 gastados a diario por el presidente de CONACULTA bien podrían ser empleados para el mantenimiento de los museos de la ciudad y, así, estos podrían bajar sus precios de acceso ocasionando, a la vez, que más gente acuda a ellos.
Sergio Vela asegura que no es culpa suya el despilfarro de dinero durante sus giras promocionales, mas bien TURISSSTE (agencia de viajes para los trabajadores del Estado) es quien alteró las cifras para perjudicarlo.
El Artículo 93 de nuestra Carta Magna, dice que: “Los Secretarios del Despacho, luego que esté abierto el periodo de sesiones ordinarias, darán cuenta al Congreso del estado que guarden sus respectivos ramos”, es por eso que hoy miércoles 12 de marzo, Vela compadecerá ante la Cámara de Diputados con cede en San Lázaro para esclarecer el asunto.
Ahora hay que esperar la conclusión de este problema. Tal vez Sergio Vela pague sólo un mínimo sus faltas pero eso no garantiza que México goce de una cultura verdaderamente envidiable. El derroche de dinero continuará y aquí seguiremos presumiendo de nuestro fabuloso Museo Nómada (parte del intercambio cultural que CONACULTA realiza) que muchos orgullosos lo visitan pero a muy pocos les termina por agradar.
Cada que las elecciones se acercan escuchamos decir a los candidatos que la educación será el principal objetivo y meta a cumplir; sin embargo este es sólo un gancho para asegurar el voto de muchos que, ingenuamente, creen que la educación en México recibirá más y mejor apoyo.
Hoy los dueños del poder, aquellos que juraron centrase en la educación dicen velar por la misma, pero ¿de qué manera lo hacen? Pues viajan al extranjero para conseguir la visita de algunas exposiciones a los diversos museos de la capital, o bien, viajan para que la cultura mexicana llegue a las salas de los museos internacionales.
El encargado de dichos viajes es el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA), Sergio Vela, quien en 2007 estuvo 46 días ausente, pues se encontraba en el extranjero velando por la cultura y, por ende, la educación de los mexicanos.
El pasado 24 de febrero los medios de comunicación anunciaron que Vela había gastado 761 mil 584 pesos durante sus nueve viajes realizados el año pasado, realizando un gasto aproximado de 12 mil pesos diarios. Si ese dinero fuera utilizado para la educación en el país, entonces diario podrían comprarse 1000 cuadernos profesionales o 3000 bolígrafos u 80 libros o hasta 2 computadoras de las más austeras para que alumnos de las escuelas públicas tengan acceso a la educación.
Ahora bien, hablando en términos culturales, esos $12 000 gastados a diario por el presidente de CONACULTA bien podrían ser empleados para el mantenimiento de los museos de la ciudad y, así, estos podrían bajar sus precios de acceso ocasionando, a la vez, que más gente acuda a ellos.
Sergio Vela asegura que no es culpa suya el despilfarro de dinero durante sus giras promocionales, mas bien TURISSSTE (agencia de viajes para los trabajadores del Estado) es quien alteró las cifras para perjudicarlo.
El Artículo 93 de nuestra Carta Magna, dice que: “Los Secretarios del Despacho, luego que esté abierto el periodo de sesiones ordinarias, darán cuenta al Congreso del estado que guarden sus respectivos ramos”, es por eso que hoy miércoles 12 de marzo, Vela compadecerá ante la Cámara de Diputados con cede en San Lázaro para esclarecer el asunto.
Ahora hay que esperar la conclusión de este problema. Tal vez Sergio Vela pague sólo un mínimo sus faltas pero eso no garantiza que México goce de una cultura verdaderamente envidiable. El derroche de dinero continuará y aquí seguiremos presumiendo de nuestro fabuloso Museo Nómada (parte del intercambio cultural que CONACULTA realiza) que muchos orgullosos lo visitan pero a muy pocos les termina por agradar.
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